"No me interesa salvar el mundo, sólo matar goblins". Unos párrafos de la novela, un par de páginas del manga o 10 minutos del anime. Eso es todo lo que se necesita para entrar en el perturbador mundo de “Goblin Slayer” y quedar atrapado para siempre. ¡¡Y Editorial Ivrea orgullosamente anuncia que publicará las novelas y el manga en Argentina!!
En un universo de fantasía que a simple vista parece un completo estereotipo, aventureros de todos los destinos y con variadas habilidades buscan unirse al Gremio, una organización que se dedica a administrar y adjudicar misiones de diversos grados de dificultad a cambio de una recompensa, con tareas que van desde ser escolta, hasta aniquilar a toda clase de alimañas. Todo comienza cuando una joven Sacerdotisa recién salida del convento decide unirse a un grupo de novatos para una misión aparentemente sencilla: eliminar goblins, seres repulsivos pero con el tamaño y la fuerza de un chico humano. Después de todo, encargarse de unos goblins de mierda aunque seas principiante no puede ser tan difícil, ¿no?. En un mundo donde las misiones súper arriesgadas y los monstruos desaforados se toman a la ligera, las masacres de personas con poca preparación son moneda corriente. En sólo unos minutos, el equipo es masacrado salvajemente y a la Sacerdotisa la salva en el último momento Goblin Slayer, un experimentado aventurero de rango plata que está obsesionado con aniquilar a esa raza, y así se inicia una incómoda alianza entre ambos.
Desde acá, la historia sigue a la Sacerdotisa y a otros aventureros que se van sumando al Goblin Slayer en su misión de erradicar a todos los goblins del planeta. Funcionando casi como una deconstrucción de los mecanismos de un género a veces tan trillado como es el "Fantasy", el autor se encarga de dejar en evidencia las cuestiones más "realistas" que esta clase de relatos suele abandonar, como tener un buen equipamiento y una táctica pertinente, lo fácil que es morir si se va sin cuidado, la verdadera relevancia de hacer misiones de bajo nivel para prepararse para las peligrosas, y cómo un pasado traumático puede dejar cicatrices hasta en la persona más imperturbable. Por otro lado, también arroja un poco de luz y esperanza cuando ensalza las virtudes del trabajo en equipo y cómo la tenacidad y la inteligencia pueden ayudar a sobreponerse en situaciones límite.
El universo de “Goblin Slayer” nació como una serie de novelas de fantasía heroica oscura, escritas por Kumo Kagyu con ilustraciones de Noboru Kannatuki. La idea se generó en un foro de rol japonés, cuando el autor se preguntó cómo sería una aventura donde el objetivo principal fueran los goblins, sin dejar de lado todo el aspecto táctico y técnico. En un principio usaba nombres y personajes de otras sagas, pero poco a poco fue dando lugar a una historia y ambientación completamente original, donde los personajes no tienen nombres propios, sino que se refieren por su clase, con una caracterización muy específica e identificable. La historia es violenta, explícita, cruda. Lo que a simple vista puede parecer un inocente RPG, se retuerce y mancha con sangre los ojos del lector desprevenido. Aquí los goblins son seres desagradables, asesinos, a los que les encanta matar y violar humanas, y esta historia no se ahorra en detalles.
La historia fue adaptada a un -parcialmente suavizado- anime de 12 capítulos que adapta los primeros tomos, y está disponible completo en Crunchyroll.
El dibujo del manga, a cargo de Kousuke Kurose, es detalladísimo, salvaje y muy bueno en explicitar con imágenes lo que se narra con tanta crueldad en las novelas.